Benzilan está entre Nixi y Deqin. El paisaje de todo el trayecto desde la carretera es un flipe. Es una pena que estaba anocheciendo. El conductor nos llevó a un
hotel que pudiera “satisfacer estándares elevados”, y acertó. Aunque, la calefacción
hubiera sido muy apreciada. En todo el norte no vimos ni un solo hotel con
calefacción. El dueño del hotel no comprendía por qué “siendo amigas” no
queríamos compartir habitación.
Los comedores tuneados del hotel.
Por la mañana.
Benzilan no es bonito ni nada de eso.
Conseguimos un
conductor. Un rebelde. Si lo ve la policía con estas fotos de "fanático" -diría el gobierno chino- se le
cae el pelo.
Desde
que llegó el conductor hasta que salimos, tardamos dos horas. El tipo llegó
media hora tarde, la malaya le dio una hora de conversación, después se fue muy
lejos a echar gasolina, y acto seguido se tomó una sopa. La paciencia, no es mi
principal virtud.
pero bueno!! qué hace ese hombre con fotos del dalai lama!! tío loco!!
ReplyDeletela visión mañanera esa... anda que no. qué bonito todo.
es viernes ya, yprh. viernes.
Tibetano. Lo mismo que otros llevan -o llevaban- una estampa de la Virgen o del Papá (peor aún, que es de carne y hueso y no deja lugar para la imaginación).
DeleteSí, es viernes, eso es lo único que importa.