Tuesday, March 28, 2017

Las excursiones XXII

El domingo me di una paliza de coche... Buscando el paisaje más perfecto, el camino más bello por el que pasear... acabé en Huesca. Al final, entre ida y vuelta fueron cinco horas de coche. Me pego tal paliza, que cuando llego, casi no me quedan fuerzas para subir montañas. Llegué a lugares muy bonitos.
Al volver, la antigua carretera de Jaca parecía el scalextric: Todos los que volvían a su casa después del fin de semana. Mal dormida: El sábado no sé qué celebraban, pero hubo fuegos, orquesta-disco party, me fui a dormir a la habitación más silenciosa, pero aún así... Petardos de cierre de fiesta, no pegué ojo en toda la noche. Agotadísima al día siguiente, principalmente de la conducción, me iba durmiendo al volante. Super esfuerzo para estar despierta, no lo consigo. Digo, voy a salir de la carretera y me echo una siesta. No hay salida, estoy metida en un circuito de carreras. Finalmente, me echo a un lado. Reclino el asiento, el sol me da en la cara, me tapo con el anorak, hace mucho calor. Caigo dormida en un segundo. Pero los coches venga circular, ¡qué ruido! Me tengo que ir a casa a dormir. Vuelvo al volante: venga yprh, abre los ojos, que tú puedes. Otra vez, ¡qué sueño! Estoy a menos de 20 km de casa. No es nada. Pero, ¡qué sueño! Ya estoy en la rotonda, llegando al pueblo. ¡Pero qué sueño! Me quiero quedar allí a dormir, ahí delante puedo parar, pero qué absurdo, estando a sólo 10 minutos de casa. LO CONSIGO: Llego a casa, hip, hip, hurra. Joselito me mira preocupado, no sabe dónde he estado pero huelo a campo y tengo mala cara. Caigo en la cama y me quedo dormida durante horas.
 

Saturday, March 25, 2017

Las obras I

Hasta hay una teoría...

Hace dos meses que empecé las obras. Si antes todo era inamovible, lento y soporífero, ahora va a la velocidad del rayo.
No me digan cómo -en algún momento- llegué a pensar que podía arreglar la casa con mis propias manos. Qué torpe percepción de la realidad, qué desmesurado optimismo, qué sobreestimación de las propias fuerzas. Un año cacharreando por casa... Si bien acometí más de lo que nunca hubiera imaginado, en realidad, ha sido muy poco, demasiado poco. Los paletas hacen en un día más de lo que yo hago en un mes. Digamos, que he estado haciendo... el tonto.
Un año tirando basura: Esperando que una visita me ayude a bajar un mueble al portal, esperando que llegue el primer viernes de mes para la recogida, traer el coche, cargarlo en el capó con la puerta abierta, ir hasta el contenedor, repetir la operación dos o tres veces el mismo día... Una cantidad equivalente a la que yo tiré en 12 meses, un solo paleta lo tiró en tres horas. Llenó un camión, y adiós muy buenas. Dos camiones de basura, dos camiones de escombros: Qué liberación.
Espera, que voy a arreglar esta silla... Yprh, despierta, hoy en día nadie arregla sillas. ¿Cuánto tiempo lleva encolar, quitar carcoma, lijar, pintar... una silla? Si fuera la silla en la que se sentaba a la mesa Louis XV, igual podíamos considerarlo. Tapizar un sofá allá que te va, vale lo mismo que comprarse un sofá guay; no uno de Ikea.
Hace diez días que tengo cortada el agua. Tengo dos fugas, una en la cocina y otra en el baño. La del baño tiene guasa, porque la tubería no va dentro del muro, sino por la pared de la habitación contigua, atrapada entre el muro y un armario de cuatro metros de altura. Actualmente, la fuga riega profusamente el armario y su contenido.
En un año, he tenido cinco averías sólo en la cocina y el baño. No está mal, ¿no? Las tuberías de plomo no dan más de sí. Ahora estoy cambiando toda la instalación del agua. La reina de Inglaterra tiene mis mismos problemas, sólo que, dudo que ella se manche las manos, y en el Palacio de Buckingham cuentan con 20 millas de tuberías.
Pero lo más importante de todo: ¡El tejado ya está hecho! ¡Hip, hip, hurra!
Cada vez que llovía me ponía mala, contemplando impotente cómo la lluvia moja los muros como quien moja una galleta en un café.
Retirar la uralita es un in-fier-no. No le recomiendo a nadie trabajar con Rehabilitaciones Solur/Amianto stop de Madrid. Son unos impresentables en toda regla: Pierden la documentación - Mienten - Hacen un plan de retirada de uralita sin ver la obra - Me piden que me suba yo al tejado a ver la uralita - Mienten - Tardan en venir 6 meses - Mienten - Son muy caros - Mal rollo asegurado. El resto de uralita la quitó otra empresa de Bilbao super bien, en una sola semana, sin mentir y todo normal.
Todo podrido debajo de la uralita...
Ahí descubrí que el altillo tenebroso tiene una longitud de ¡más de 9 metros! Pero sólo una altura de 1,30 m, aproximadamente. Y aún descubrí algo más. Al final del túnel, hay un muro, y detrás del muro, hay otro altillo, de unos 4 m2, y mayor altura, pero... Al que ¡el vecino se ha abierto una puerta a mi casa! ¿No es muy raro que el vecino pueda acceder a un altillo de mi casa y yo no? ¿Y que para acceder a ese altillo, tenga que gatear 9 metros de distancia y tirar un muro?
Otro trozo de tejado...
Me agoto sólo de ver las fotos y recordar el pasado... Otro día sigo.