Estaba repleto de gente haciendo ofrendas. Imagino, pidiendo deseos para el año nuevo.
Lo de abajo, ¿son dioses? Me resultan sorprendentes las figuras religiosas budistas. Esos muñecotes multicolores... Después de la línea hardcore de iconografía católica: cristos ensangrentados, vírgenes llorando... lo budista es como de broma.
"¡Es la guerra! ¡Traed madera!" podía estar diciendo este señor. No daba a basto incinerando objetos de papel para el disfrute de los muertos en el más allá. A escasos cuatro metros, otro señor, igual de ocupado que este, no paraba de vender papelillos e incienso. Unos los fabrican, otros los compran, los venden, los compran, los queman. Parecía todo una puesta en escena del capitalismo. Bien pensado, los humanos, somos unos animales bien raros. Los raros, a decir verdad.
Lo que hay en la parte superior (de la foto de abajo) son conos gigantes de incienso. Picaban los ojos del humo que había en el templo.
El templo visto desde fuera.
qué vida esta. de verdad. los raros.
ReplyDeleteVoy con el comentario pedante del dia: los cargos politicos eran poetas porque para currar en el gobierno habia que pasar un examen en el que te preguntaban sobre clasicos de la literatura y tenias que escribir tus propios poemas. Y esto fue asi hasta 1905. Para que preocuparse de que los politicos fueran eficientes u honrados, no senyora, lo importante es que sepan escribir sonetos y reciten a Confucio!
ReplyDeleteGracias por la aclaración.
DeletePues me parece genial. Ahora ni son honrados, ni eficientes... y mucho menos escriben o recitan poemas.
Pues también es verdad, jajaja.
Deletehttp://dailymetal.eu/blog/miju-lee--suenos-cotidianos/1201/
ReplyDeleteacordándome de ti
Ojala se siguiera haciendo lo de aprender a Confuncio...
ReplyDeleteMira lo de quemar... Los valencianos y las fallas... Que piraos (que viene de pira)
Uy, pues sí, tiene que venir de pirado.
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