El paisaje desde el bus de Kangding a Litang es realmente
bonito, despoblado y salvaje.
Tal y como pronosticaron en el
hostal, nada más empezar a subir estaba la carretera helada. Aquello era un patinete.
Los coches paraban para poner las cadenas y echar arena al suelo.
Las
alturas dan mucho sueño. Hacía un gran esfuerzo por tener los ojos abiertos
para no perderme nada, pero en realidad, iba de siesta matutina en siesta
matutina. Bien pasado Kangding no hay ni carretera, son caminos de tierra, carretera
con boquetes. Por eso se tarda una eternidad en hacer unos pocos kilómetros.
Parece que el gobierno chino no es diferente a los demás, sólo se gasta dinero
en lo que se ve. Mucho despliegue para los juegos olímpicos, Pudong… Y luego, en el interior de
China ni carreteras, ni agua, ni calefacción.
Una vez más lo hice fatal, pasé muy rápido de poca altitud a
mucha altitud, sin aclimatamiento alguno; y me puse malísima. Chengdu está a
unos 500 m de altitud, Kangding a 2500 m –donde sólo pasé unas horas- y en la
carretera subimos a 4500 m. Casi me da el chungo del siglo en el bus. Estábamos
a varios grados bajo cero, yo en manga corta, y me empezó a salir fuego de la
espalda, unos sudores, una jaqueca, una falta de oxígeno total. Intenté abrir
la ventana, pero no pude luchar contra todos los chinos del bus, en tal estado
de debilitamiento, que me miraban como si estuviera majara.
Litang desde la montaña -no es la foto de arriba- parece un pueblo de Oriente medio en
un valle de arena rojiza. Me hubiera gustado hacer una foto, pero no tenía fuerza para sacar la cámara del bolsillo. Este fue otro trayecto de unas nueve horitas.
Cuando entramos en la mini estación, dos policías
apuntaban al autobús con metralletas y nos miraban a cada uno de los pasajeros a los ojos, como si buscaran a alguien en particular. Nunca antes me habían apuntado con un arma, casi me cago en las braguitas. Dentro, el ejército estaba esperándonos. Por lo menos
50 soldados, armados hasta los dientes, protegiéndose con escudos y listos para
el ataque. Como si en vez de un autobús de campesinos, hubiera entrado un
tanque con terroristas.
Si querían impresionarnos,
lo consiguieron, me dejaron boquiabierta.
Bueno, bueno, el ejercito esperando alli... y trincaron a alguien??
ReplyDeletebraguitas ji ji,... pffffff
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