Una
de las peores cosas de los viajes al interior es la imposibilidad de conseguir
un taxi con taxímetro. Se ponen de acuerdo a la salida de aeropuertos y
estaciones de trenes y o les pagas una pasta o no te llevan. Y es un regateo
sin fin.
Pues
eso no pasa en Jingdezhen. Lo han solucionado de una manera más amistosa. Los
taxímetros empiezan en 8 yuanes en vez de los 14 de Shanghái. Lo cual no les
debe salir a cuenta y hacen viajes compartidos. Si más o menos pilla de camino,
llenan el taxi de gente y cobran lo que marca el taxímetro por cuatro, que
es una pasta.
En
general, en Jingdezhen no son nada timadores. En Wudalianchi -por ejemplo- eran
todos unos chorizos de cuidado. Creo que se debe a que no hay mucho extranjero,
a parte, de los que están haciendo negocios o van a residencias cerámicas.
Cuando vas por la calle todavía la gente te dice “Hello”, y te pide que poses en una foto con ellos. Hacía mucho que
no me pasaba eso. ¿Para qué narices querrá la gente una foto con una
desconocida?
The Sculpture
Factory
es un complejo enorme al este de la ciudad en el que hay por lo menos cien
talleres de artistas, ceramistas, cerámica industrial y universo kitsch. Allí
está el famoso Pottery Workshop, que
ofrece residencia a artistas a cambio de un dineral, que tiene tiendas en
Shanghái y en Hong Kong. En pocas palabras: está regentado por gente lista capaz de
forrarse con la cerámica. Siempre tienen cosas chulas y hasta una cafería
decente. Los sábados por la mañana hacen el Mercado Creativo, con cosas de los
talleres de la zona y de los ceramistas jóvenes. Fui directamente desde el
aeropuerto para no perdérmelo.
Me
fui con una maleta vacía… por si acaso. Y me la llevé llena. Es la fiebre
cerámica. Cosas que me compré en este mercadillo:
Porcelana.
Esto lo compran hecho -de molde y de fábrica- y los dibujos los pintan a mano. Los vasos de té con
dibujos de peces son de la misma. Me flipan estos dibujos desenfocados, estas fotos son un churro, pero yo me tomo aquí el té y entro en un trance que salgo
de este mundo.
Esto también es de la misma, pero es gres en vez de porcelana:
Cucharillas
de porcelana, hechas y pintadas a mano:
Un
vaso de gres hecho a mano en el torno y cucharilla de porcelana, ambos pintados
a mano:
Tres
vasos de té o de chupito de porcelana hechos a mano. Hacen una plancha fina, la
cortan la enroscan y la pegan:
Plato
de gres hecho a mano en el torno, bol industrial y cucharilla de porcelana
hecha y pintada a mano:
Dos
platos de porcelana, hechos y pintados a mano:
muchas fiebres tienes tu eee
ReplyDeletemolan las piezas unas + que otras
Muchas, muchas.... Se pasan unas y llegan otras.
Deleteme estoy poniendo al día con el viaje.
ReplyDeletepues a mí me gustan todas. las cucharillas me parecen lo más.