El fin de semana con E: 4ª parte

Ding Tai Fung es una famosa cadena de restaurantes taiwaneses especializada en dumplings. Ir a Ding Tai Fung es una de las primeras cosas que hace la gente cuando llega a la ciudad. Yo aún no había ido porque el restaurante de Xintiandi tiene unas colas de gente que dan mareos.

Según E -y mucha otra gente- hacen los dumplings más ricos. A mí me gustaron, claro, pero prefiero los de Yue 1525 o los de Lynn (los dos de estilo cantonés).

Los xiao long bao (=empanadillas al vapor con sopa) tienen una masa fina y caldo dentro. En el platillo se ponen 3/4 de vinagre chino, 1/4 de salsa de soja y el genjibre rallado. Se moja el xiao long bao en la salsa y se coge un poco de genjibre a la vez con los palillos. Se deposita el paquete en la cuchara, se le hace un agujero con el palillo y se sorbe el caldo; después se come.

Una de las cosas buenas de Asia es que hay sopa por todas partes. Mi interés por la sopa despertó en el año 2000 en Tailandia, y hoy en día, y desde hace años, es mi plato favorito, cada día me gusta más. ¡Sopitaaaaaa!

Esta era una sopa de ternera y trufa con un caldo sencillo. La primera cucharada me transportó al Paraíso, os lo juro. Pero luego, aunque era muy pequeña, se nos hizo cuesta arriba acabárnosla. Sabía tanto a trufa que era como beberse un ambientador para el coche. Eso sí, la primera cucharada, nunca la olvidaré.

Cuando llegas a Asia y tienes un primer contacto con las legumbres dulces con hielo como postre, te dices: “Pero, ¿qué broma es esta?”. A la que las pruebas cuatro veces, ya no puedes vivir sin ello.

En la foto, de izquierda a derecha: cebada, boniato, alubias rojas, tapioca, alubias verdes, taro, y detrás de la montaña lentejas. Faltan las semillas de la flor de loto, mis favoritas. Esto es siempre lo mismo: una montaña de hielo picado finísimo, un sirope y las legumbres. En Din Tai Fung es un poco más elaborado. Y en vez de ser la montaña sólo de hielo, tenía dos niveles: uno mezclado con algo dulce y lechoso en el interior, y el marrón, con caramelo. En invierno hace falta un té para que no se congele el esófago. Que oye, sales a la calle con un cuerpo, que parece que estás en Siberia.