Es una película encantadora de Jacques Demy, 1964. No sería
nada de otro mundo, si no fuera un musical. Esto tiene mucha, mucha gracia. Al
ser un musical -una ‘zarzuela francesa’, una opereta, no sé cómo llamarlo-,
parece que nada tenga importancia. Que si me querías y ya no me quieres, que si
no tenemos dinero vamos a vender las joyas, que si estoy embarazada a ver qué
van a pensar los vecinos, que si pido yo a usted su mano, la la la la…. Y
debajo de esta forma musical hay una gran verdad, porque realmente, nada tiene
demasiada importancia; al menos para los otros, y en el cine, tiene todo una
vehemencia que no es real.
Pues eso, Catherine Deneuve está enamoradísima y cree va a
morir al separarse de su amado porque va a la guerra, jura que lo esperará por siempre.
Pero oye, pasan los meses, y aquella historia de amor es como algo que sucedió
en la otra vida. No duda en casarse con otro unos pocos meses después. El tipo,
no ha pasado ni dos años fuera y cuando vuelve, si te he visto no me acuerdo.
En Francia tuvieron también los happy 60’s, y la gente se vestía de colorines. Todos los franceses
que conozco siempre me intentan convencer de que los colores son horteros y ponen
de ejemplo esa época. ¡Pobres franceses que se visten de negro porque les
tienen miedo a los colores!
Aquí está la película entera:
http://www.youtube.com/watch?v=X89lrhhDLCc&feature=endscreen
Aquí está la película entera:
http://www.youtube.com/watch?v=X89lrhhDLCc&feature=endscreen